¿Cómo preparar tu propiedad ante inundaciones?
En España 700.000 personas viven en zonas con alto riesgo de inundabilidad. Hoy abordamos cómo afrontar este riesgo. Lo haremos con preguntas sobre seguros y recomendaciones tanto para prevenir su impacto, como para intentar evitar la devastación de una riada.
Preguntas sobre seguros:
1. ¿Cómo puedes paliar las consecuencias económicas de una inundación antes de que ocurra?
Asegúrate que tienes una póliza de seguros actualizada y que en ella estén cubiertos los daños por excesos de pluviometría, las filtraciones de terrazas, las procedentes de azoteas, tejado o fachadas.
2. ¿Cuál es la cantidad de lluvia a partir de la cual las aseguradoras cubren los daños que se puedan ocasionar?
40L por m2. y por hora.
3. ¿Qué legislación regula la contratación de seguros en España?
La Ley 50/1980.
4. ¿Hay algún organismo público que proteja ante fenómenos extremos?
Sí, el Consorcio de compensación de Seguros e incluye las precipitaciones torrenciales.
5. ¿Qué registros de precipitación usan las aseguradoras?
Los de la Agencia Española de Meteorología (AEMET).
¿Cómo evaluar, prevenir y actuar el riesgo de inundación de tu vivienda?:
Aquí introduciremos la herramienta que vertebra el artículo: la "Guía para la reducción de la vulnerabilidad de los edificios frente a las inundaciones" del Ministerio de Economía, Industria y Medioambiente (2017).
1. Conoce bien en qué tipo de terreno está asentada tu casa: no es lo mismo uno poroso lecho de un antiguo río con suelo arcilloso, muy peligroso, que uno más sólido y alejado de ramblas. Cabe señalar que aunque nunca podremos controlar la naturaleza objetivamente no todos los lugares tienen la misma peligrosidad. Por otra parte, la situación geográfica de la vivienda también es primordial. En este aspecto es importantísimo formularse y formular a los técnicos preguntas como las siguientes:
1.1 Tu vivienda se encuentra ¿en la costa u al lado de un río?¿Sí?
1.1.2 ¿Está alejada del mar o cercana a él?
1.1.3 ¿Nuestra vivienda está en el interior? ¿Sí?
1.1.4 ¿Cerca de taludes de montaña en un terreno árido (sin masa boscosa y nula canalización)?
Una respuesta afirmativa a los factores 1.1.2 y 1.1.4 dispara el riesgo de inundación de la propiedad. En caso de tener los medios, aconsejamos construir algún tipo de muro -con permiso municipal- circundando nuestro hogar para aislarnos del curso del agua descontrolado en caso de que caiga mucha agua será efectivo. Sobre este punto, creemos interesante que leas en la Guía "los factores que determinan sí un edificio está en una zona inundable" (páginas 23 a 26).
2. ¿En qué tipo de vivienda vives?
En una casa aislada en una urbanización o en un bloque de pisos en la ciudad: debes tener muy bien identificadas las vías de salida de la casa: en caso de riesgo llamar al teléfono de emergencias de tu ciudad o a los bomberos.
3. Ten en cuenta en qué piso vives: los bajos y los áticos son más susceptibles de acabar inundados.
¿Cómo evitar las consecuencias más graves de una inundación en casa?:
1. Inspecciona desde fuera primero y desde el interior después posibles vulnerabilidades de casa fíjate en aspectos clave como:
Limpiar las hojas secas acumuladas en los sumideros de jardines o terrazas para que estos absorban el máximo de agua.
Tapar grietas
Reforzar/apuntalar puertas y ventanas
Tapar/reparar las ranuras o desconchados que puedan haber a los lados de puertas (tapa el espacio entre dintel y puerta) y ventanas
Cerrar las ventanas, reforzar los cristales y bajar persianas
Reparar las juntas de la terraza como explicamos en agosto.
Presta especial atención a trasteros, sótanos y garajes
Detectar y acabar con las goteras/filtraciones en cualquier sitio.
Lo ideal sería reparar estos ocho puntos antes de la inundación. Al margen de "lo ideal" en la página 30 de la guía hay un esquema a retener: por dónde entra el agua + qué puede dañar= diagnóstico actual--> búsqueda de soluciones.
2. Haz un inventario de los objetos de valor y mascotas que hay en tu propiedad: ayuda a reflexionar sobre qué hay que proteger a toda costa del agua (los documentos de papel, por ejemplo, se deterioran con rapidez en contacto con el agua).
3. Revisa la instalación eléctrica: señalar que a nivel residencial debe pasar una inspección cada 5 años, mientras que si hablamos de un local comercial el plazo de inspección es menor: de 3 a 5 años. El circuito eléctrico es una posible vulnerabilidad cuando llueve hay que tenerlo a punto.
4. Evita que el agua toque los cables y otros aparatos eléctricos: los tomacorrientes GFCI, al percibir una bajada de tensión, se desconectan del flujo automáticamente e impiden la electrocución. Sí la tormenta es extremadamente fuerte y eléctrica desconecta el cuadro eléctrico para que se queden sin alimentación todos los electrodomésticos sin excepción. Aísla los cables del agua con empalmes y coberturas impermeables.
5. Encarga la revisión de los elementos estructurales, por ejemplo: cimientos, pilares, fachadas, revestimientos etc.
6. Eleva los electrodomésticos con repisas: en páginas sudamericanas que preparan para huracanes hemos leído está recomendación no siempre realizable en España. No está de más pensar en soluciones constructivas parecidas y, en usar los cajones altos para lo que debemos resguardar. En España los fenómenos de lluvia podrán ser muy violentos (como los 300 litros/m2 en Alicante) pero no arrojaran lluvia sobre un punto concéntrico durante largo tiempo como hacen los huracanes.
Finalmente, para ayudarte aún más, clasificamos las actuaciones concretas que se pueden llevar a cabo frente a una inundación de menor a mayor gravedad (página 34) :
1. Evitar: impedir que el agua rodee al edificio.
2 Resistir: preservar el interior del edificio.
3 Tolerar: dejar entrar el agua en el edificio pero protegiendo adecuadamente los objetos o seres vivos en él.
4 Retirarse: a veces puede ser tan grande la inundación que ninguna de las medidas anteriores sea efectiva. Es aquí que hemos de tener presente cuáles son las salidas del edificio.
La guía aborda los cuatro aspectos de la página 34 a la 46 y, también es útil leer sobre cómo mitigar los daños entre las páginas 46 y 53. No creemos en reproducir contenidos sin límite: quien nos lee es inteligente. De todos modos con nuestro trabajo y, las fuentes externas, te hemos preparado para afrontar una devastadora inundación.